Quiero comenzar antes de sumergirnos dentro de los que son algunos de los pasajes de nuestros personajes, detenernos un poco y obtener de los archivos consultados para confeccionar el guión, la imprescindible mirada histórica. Dar las gracias a Cristina Pérez, Francisco Crespo, con un don especial para estar delante de una cámara. Además de magníficas personas. También a Elisa Bárbara, Tomás García, Diego Suárez, y un sin fin de colaboraciones; además de diversos estamentos que nos han permitido recabar información y la cesión de los permisos pertinentes como el Parque Nacional Montes de Málaga.
Recreación cinematográfica con Cristina Pérez en el papel de la reina. ©A.Diestro. |
Sobre restos fenicios, griegos, romanos, bizantinos y visigodos, los musulmanes crearon al-Andalus. Málaga pasaría por cada una de las fases que al-Andalus también pasó; así, fue parte del gualiato, del emirato y el califato omeya hasta que éste cayó. Después, fue reino de taifa con su propia dinastía y formó parte de los imperios almorávides y almohades y, al fin, parte del reino nazarí de Granada.
Llegada del emisario del rey para comunicarle la conquista de Málaga. ©A.Diestro. |
Málaga, una de las plazas más importantes del reino Nazarí y una de las empresas de mayor envergadura que tuvieron que afrontar los Reyes Católicos antes de la toma de la capital del reino nazarí. Málaga es, seguramente, la segunda ciudad más importante del emirato nazarí. Además, es un puerto de entrada desde el norte de África, desde donde tradicionalmente, desde el siglo XIII, están llegando tropas mercenarias o en apoyo del reino nazarí; con lo cual el control de la ciudad era importante.
Recreación al sitio de la ciudad por los ejércitos de los Reyes Católicos. ©A.Diestro. |
La ciudad estaba muy bien defendida por la Alcazaba y el castillo de Gibralfaro, dos fortalezas que hoy todavía son santo y seña de Málaga y alzan magníficas al cielo azul de la bahía. Estaba poblada por unas tres mil familias, es decir, alrededor de doce mil habitantes. Era, pues, una plaza fuerte y bien protegida. El asedio duró cuatro largos meses, dado que la ciudad costera nazarí estaba fuertemente defendida por quince mil soldados musulmanes que tuvieron que hacer frente al ejército cristiano compuesto por veinte mil jinetes, cincuenta mil peones y ocho mil soldados de apoyo, a ello se unió el contingente comandado por Diego Ramírez de Madrid, artillero mayor del reino.
Restos de el muro que rodeaba a la ciudad fortaleciendo su defensa. ©A.Diestro. |
Estando las tropas de los Reyes católicos rodeando las murallas de la ciudad en su intento de conquistarla, sucedió uno de los incidentes más enigmáticos de la conquista fue el intento de asesinato de Isabel la Católica por parte de un misterioso personaje que intentó atentar contra la reina durante el asedio. El ejército cristiano abre una brecha en el castillo de Gibralfaro para entrar en la ciudad, pero los defensores contraatacaron de noche, causando bajas en el ejército cristiano y recuperando el terreno perdido. Este contratiempo desalentó a los castellanos y el rey Fernando pidió a Isabel que viniera hasta el campamento para dar ánimos a las tropas. Lo cierto es que su estancia en el campamento casi le cuesta la vida. Un personaje llamado Ibrahim el Guerbi que llevaba muchos años viviendo en Guadix, donde alcanzo cierto renombre como santón debido a sus habilidades para predecir el futuro. Tras un enfrentamiento en el interior de la ciudad, el personaje se presentó en el campamento cristiano manifestando su deseo de ver a los reyes para comunicarles cuando se produciría la conquista de la ciudad.
El Guerbi ataca a D.Alvaro de Portugal e Isabel de Bobadilla. © Rodrigo Duque. |
Ponce de León decidió alertar a los reyes de la presencia del santón ante la posibilidad de que tuviese algún tipo de información que pudiera ser relevante. A la espera de ser atendido, el Guerbi fue conducido a la tienda donde descansaban Don Álvaro de Portugal e Isabel de Bobadilla, la Marquesa de Moya. El exaltado musulmán, pensando estar ante la presencia de los mismísimos reyes de Castilla sacó la espada y golpeó a Don Álvaro, hiriéndolo gravemente. Ante los gritos de la marquesa acudieron rápidamente Fray Juan de Belalcazar y el tesorero Rui López de Toledo, que consiguen reducir al santón, posteriormente llegaron Martin de Seña, Luis Amar y Tristán de Ribera que sacándole fuera de la tienda, acabaron con él. De esta manera se dio al traste con el intento de asesinato de la reina Isabel, que de haberse perpetrado habría cambiado los acontecimientos posteriores de la Reconquista. El cuerpo del santón fue lanzado a la ciudad con una catapulta, siendo inmediatamente recogido y enterrado con gran veneración por sus seguidores. Estos, en venganza, mataron a un hidalgo cristiano que tenían cautivo, lo ataron a un burro y lo encaminaron hasta el campamento de los reyes.
Torre de la iglesia de Santiago en el Centro Histórico de Málaga. © Elisa Bárbara. |
Como nuestro documental está enfocado en la construcción de la Catedral de Nuestra Señora de la Encarnación y su devenir a los largo de los siglos, porque es el punto de inflexión desde donde parte de la voluntad de la reina Isabel para que se construya un templo en honor a la victoria y entrada triunfal el 19 de agosto de 1487. Sin embargo, y tras realizar unos trabajos en la actual Puerta del Perdón y el comienzo de las obras encargadas al arquitecto Diego de Siloé, la primera parroquia en terminarse es la iglesia de Santiago, el primer templo cristiano de la Málaga católica. Fue construido en estilo mudéjar en el solar de una pequeña mezquita apenas tres años después de la toma de la ciudad, en 1490.
Cristina y Francisco repasando una escena. © Elisa Bárbara. |
Tan solo recordar que en la sillería de la catedral de Toledo nos muestra un gran tesoro sobre la ciudad de Málaga, pero lo más destacado reside en que estas representaciones son las más antiguas que existen de la ciudad. El coro bajo la sillería es obra de Rodrigo Duque apodado "El Alemán", también estan representados diversos pueblos malagueños tras la reconquista de los mismos.