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miércoles, 8 de abril de 2020

A nuestra Semana Santa, la mejor del mundo y reflexiones de un ciudadano que ama su país

Recluidos y con el corazón en un puño, por ser persona de alto riesgo, me preparé ante la llegada de la Semana Santa como vengo haciendo desde muchos años atrás para fotografiar el solemne acto de La Legión con su Cristo que tanto fervor arrastra por su tradición y exclusividad malagueña. Todo estaba listo y de golpe cambió el guión establecido cuando ya tenia la decisión de concentrarme un año más y poder estar preparado para asumir mi atrevimiento de fotografiar de forma diferente a nuestro querido “Cristo de Mena”.
Y aunque no tengamos la fortuna de otros años de poder disfrutar de los recorridos por las calles de Málaga de todas y cada de las Hermandades malagueñas, sin dudarlo la mejor Semana Santa de España, levanto mi cara y mirándote a los ojos, pedirte que cada día te necesitamos para que ilumines el camino, de los que creemos en ti y sobre todo, a estos elementos que quieren consagrarse a perpetuidad en un homenaje a la mediocridad que hoy impera en el mundo y por desgracia se asentó en nuestro violado país.
Esa catadura de políticos usurpadores del poder popular donde la mentira, el caciquismo y la falta de valores reina, cuál becerro de oro postulando desde ese cenit efímero sus credos que según sople el viento cambian para tenerlo a su favor y nunca cumplen lo prometido. Pero tú, que conoces el mayor sufrimiento efectuado por el ser humano, da “luz” para que encontremos el camino de la coherencia, el entendimiento y la concordia con la educación necesaria.
"La hipocresía y la mentira son premisas de la mediocridad
que se ha instalado cómodamente en nuestra política
sin el menor respeto a nuestros valores, sin ética, sin moral, 
sin respeto a las tradiciones y sin sentido común.
Instalados en la mentira, la sinrazón e incluso la falsedad;
donde se vende al pueblo, como Judas te vendió a tí.
Por eso Jesús, Cristo de Mena,
no nos abandones y otórganos la virtud de la paciencia
para soporta esta grandísima desgracia que tenemos en España. 
Porque la mediocridad y sus mediocres
son los que imperan en la mayor parte
de nuestro egoísta y agónico sistema “democrático”.
No he podido disfrutar de los actos que año tras año tengo la dicha de ver cómo nos redimes del pecado y de los fariseos como los dirigentes que nos gobiernan. Te pido aceptes de este ser humano mi humilde contribución para que volvamos a encontrar el sendero de la concordia, y sobre todo del respeto, como base de la convivencia. Creo, estoy convencido, que cuando pasemos este oscuro túnel que estamos viviendo, tengamos la serenidad y el convencimiento necesario para cambiar el rumbo de la sociedad, la convivencia y marquemos un camino nuevo para dirigir nuestra sociedad a otra meta muy distinta a la actual que nos lleva a la autodestrucción.
En este trance de incertidumbre es fácil olvidar las inversiones millonaria que con el dinero público invaden nuestra intimidad repleta de información política cada vez que sus “señorías” convocan elecciones y no son capaces de tener mascarillas y enviar al menos para la gente mayor un par de ellas por correo. El pueblo siempre ha sufrido de esta catadura de personajes en toda su historia. Algún día debería pedírsele esa responsabilidad, que para ser cierto nunca tienen y se van de rositas. Otro ejemplo de su desfachatez ha sido cobrar a más de tres millones de autónomos el pasado 31 de marzo su cuota estando sin trabajar por una causa mayor. Sin embargo en el Real Decreto-Ley de medidas económicas complementarias para paliar los efectos de Covid-19, se incluye una subvención de 15 millones de euros para sus televisiones Grupos Atresmedia y Mediaset, Es decir la propaganda del régimen.
Ahora en los anuncios de los bancos, todo es bondad, de color de rosa, todo muy dulce y bonito. Pero nadie les pide el dinero que tenían que devolver. Lo repitieron hasta la saciedad. Fue el discurso oficial del Gobierno: el rescate del sistema bancario no costaría "ni un euro" al contribuyente. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en junio de 2012, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso aseguró que era "un crédito a la banca que va a pagar la propia banca". En agosto de aquel mismo año y también tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría explicó que el objetivo de la reestructuración del sistema financiero era que no le costase "un euro al contribuyente”. De esta mujer, políticamente ha desaparecido, mentiras y más mentiras.
Ahora sabemos ya que es una ayuda irrecuperable y que sólo volverán a las arcas públicas 14.275 de los 54.353 millones prestados al sistema bancario. Además a Europa se lo devolvió lo que prestó. Siempre pagan los mismo y ellos de “rositas”. Tiempo al tiempo. Ya veremos lo que nos espera de esta jauría insaciable. Unas leyes que amparan al político y el ciudadano solo tiene derecho al pataleo, después de sangrarlo.
Porqué tenemos que ver cómo arrasan impunemente el país personajillos del tres al cuarto, sin catadura moral que solo les importa su ego repleto de dinero. Quiero  terminar con una reflexión del Dalai Lama, que a buen seguro nos aportará un punto de vista serio, equilibrado  y con mucha verdad sobre nuestra sociedad perdida de valores, sentimientos y convicciones políticas que representen al pueblo.  Es un gran país España si tuviera un gran señor. Que pena.

"El hombre fue creado para amarse y las cosas para usarse. 
En este mundo de hoy desquiciado por el egoísmo 
las cosas se aman y al hombre se le utiliza. 

Lo que más me sorprende del hombre occidental 
es que pierden la salud para ganar dinero, 
después pierden el dinero para recuperar la salud. 

Y por pensar ansiosamente en el futuro no disfrutan del presente, 
por lo que no viven ni el presente ni el futuro. 
Y viven como si no tuvieran que morir nunca, 
y mueren como si nunca hubieran vivido”. (Dalai Lama)
Fotografías: Archivo Antonio Diestro Quijano

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