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lunes, 1 de agosto de 2022

Cuando la mano del Artista muestra su alma en armonía con la técnica y el color. Concepción Jiménez Quesada la perfección de sus lienzos.

Concepción Jiménez Quesada, pintora española de estilo realista con una destreza singularidad que viendo una de sus obras nos permite visitar su alma de gran artista. Destaca por su trabajo del natural, paisajes, marinas, naturalezas muertas y especialmente, la figura humana y el retrato.


Conchita ante su obra  homenaje al gran Velázquez.© A Diestro

La pintora andaluza nació en la ciudad de Córdoba, España, en el año 1928 en el seno de una familia numerosa siendo ella la quinta de seis hermanos. Aún muy pequeña, tenía 3 años, su familia se traslada a la ciudad de Málaga donde residirá hasta 1953, año en el que contrajo matrimonio con Juan José Salinas Baena  cofrade, archivero y cronista de la Archicofradía de la Sangre malagueña, trasladando su residencia posteriormente a la capital de España, Madrid.

Una etapa en Málaga para la genial pintora.

Toda su etapa de formación en las Bellas Artes la realiza en la Escuela de San Telmo de la capital malagueña además de asistir a clases de dibujo. Con tan sólo 14 años de edad ya destacaba por sus capacidades tanto en pintura como repujado, modelado y cerámica artística.

Estudió con grandes maestros de la época como Antonio de Burgos Oms.

Sus profesores fueron pintores tan reconocidos como Antonio de Burgos Oms, Elvira Alot, Virtudes Montilla, José Castillo, Alfonso Real  siendo algunos de ellos patronos fundadores del antiguo  Museo de Bellas Artes situado en el Palacio de Buenavista, sede actual del Museo Picasso, teniendo como compañeros autores importantes y conocidos durante el s.XX  dentro de la Escuela Malagueña como Virgilio Galán, Alfonso de la Torre, Maria Luz Valero, Pilar Cafarena, Carmen Bachiller, Clara Mowray y el gran retratista Felix  Revello de Toro entre otros.


Sus óleos son historias y belleza para admirar su arte.© A Diestro

En 1944 asiste a las clases de pintura al óleo de la pintora  Trinidad Rey que tenía su estudio en la  calle Beatas.


Paco Hernández en su estudio. © A Diestro

Sus primeras exposiciones son conjuntas dentro de lo que se conocía en la ciudad de Málaga pintores de la década de los cincuenta como Generación del Cincuenta” entre los que se encontraban también autores como Francisco Hernández, García Rizo, Blanca Mora y Mingorance Acién. Estas exposiciones o certámenes de carácter anual eran sufragados por Educación y Descanso”, organización sindical española de la época franquista dedicada al fomento cultural que se celebraban en la Sociedad Económica” , en las que Concepción Jiménez Quesada obtuvo primeros premios y becas de estudio.


Su estilo de pintura es realista, trabaja del natural, le interesan paisajes, marinas, naturalezas muertas y , especialmente, la figura humana y el retrato.


Una vez instalada en Madrid, casada y madre de tres hijos, su producción artística queda mermada por la falta de tiempo.


Málaga y la Semana Santa ha sido una fuente de inspiración.

Reconocimiento a Conchita de la S.Santa malagueña.

Concepción Jiménez Quesada estando muy unida a la Semana Santa malagueña realiza, hasta la actualidad,  óleos de los sagrados titulares de las diferentes cofradías malagueñas, encargados por las hermandades, además de carteles y estandartes procesionales como el realizado en 2005 para la Cofradía de “La Humillación”, el cartel de “La Virgen de la O”, cartel de “Viñeros” en 2006 etc. 

El conocimiento de la luz en esta obra es genial.

Es un ser humano entrañable y sobre todo artista hasta para contar sus anécdotas de juventud y de sus vivencias en Málaga. Su diaálogo es fluido y nos introduce en su forma de entender la pintura en la actualidad. A mi me llamó la atención un pequeño cuadro con una copa de agua y una rosa en la mesa. La copa y el agua del interior, me llevó de inmediato al Aguador de Velázquez, que lo pintó en su juventud en los últimos días de su estancia en Sevilla. Su destreza con los pinceles, el dibujo y su prestancia para dar vida a sus sueños, tienen todo el alma en el lienzo. Conchita es un genio de la pintura actual española.


El marengo remienda las redes y la jábega junto a él con su ojo.

La calle S.Agustín donde vivió Conchita.

Aún fresca estaba en el caballete esta obra dedicada a su calle en Málaga, la calle San Agustín, y nos contó como el recuerdo que tiene de uno de sus grandes maestros, Antonio Burgos Oms, "Don Antonio nos llevaba muchas veces para que admiráramos la belleza de su construcción, tanto por fuera como por dentro y terminó, en este apartado, contando el porqué esta sin terminar y por lo que a la catedral le llaman La Manquita. Un apunte fotográfico.

Unas fotos para el recuerdo de sus visitas a "La Manquita"


La Manquita  desde la calle S.Agustín. © A Diestro
Ntra. Señora de la Encarnación obra de Diego de Siloé. © A Diestro

Interior de la gran basílica malagueña: La Manquita. © A Diestro

Su rincón para pintar, como ella lo llama, es sencillo junto a una ventana. En ese espacio se respira su alma, su técnica, todos lo pinceles y los colores que dan la vida a sus obras de arte.


En el rincón donde da vida a su genial técnica pictórica. © A Diestro


Un óleo dedicado a los niños otra pasión de Conchita.

En el caballete el retrato de su biznieto

Antes de despedirla nos dijo que lo que más le gusta ahora mismo es pintar a los niños y nos enseñó el esbozo que ha trabajado para dedicar un cuadro a su biznieto. Felicidades Conchita por su arte, su calidad humana y por permitirnos entrar en su Santa Santorum, también a su hija Virginia por su simpatía y gentileza.

Gracias a ti también Virginia. © A Diestro

"Gracias porque estais desde ese día en nuestro corazón. El arte se lleva en el alma; pero lo que manifiesta al genio es poder expresarlo. Gracias Conchita por dejarnos ver su alma a través de sus obras."

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