De regreso de la vendimia en Lachar junto a los amigos y la familia, quiero levantar mi brazo con una copa por mi hija, un trabajo de años sin esclavizarse y un poco de paciencia y mucho conocimiento del tema vino, dan por sentado una buena cosecha.
Una uva que tendría su esplendor a finales de septiembre |
Así estaban las viñas a finales de agosto y principios de septiembre. Todo estaba pensado para recoger el fruto de unos cuantos años de espera.